Criar hijos disciplinados es imprescindible para que su desarrollo sea óptimo, tanto en niveles de relaciones, educativos y personales. Establecer límites en sus comportamientos desde muy pequeños significa educarlos sobre cómo deben comportarse de acuerdo del lugares, situación o momento en el que se encuentren.
Tiene que ser conscientes de que no pueden conseguir todo cuando ellos quieren. Deben aprender a tolerar la frustración y comprender los tiempos de espera. Es importante que asimilen las normas de convivencia y de relación social, pues esto fomentará que en la vida adulta puedan vivir de la mejor manera posible y sepan responder de forma satisfactoria a las distintas situaciones que se les presenten.
Para que la educación con tus hijos sea eficaz, debes señalarles las reglas en el hogar, con el objetivo de las cumplan y respeten, y evitar caer en la sobreprotección .
Para establecer unos límites eficaces tienes que ser coherente y firme . No establecer pautas adecuadas, o bien, que no sea posible llevarlas correctamente, pueden tener consecuencias negativas en tus hijos, como faltas de respeto, desobediencia y baja tolerancia a la frustración.
¿Por qué los límites son indispensables?
La piscóloga Isabel Menéndez Benavente te muestra los beneficios que tiene poner límites a tus pequeños:
- Les das seguridad y protección.
- Les permites anticipar su reacción ante posibles situaciones o conductas.
- Les facilitas una referencia de comportamiento y esto les da seguridad e independencia .
- Los niños ven que eres fuerte y firme, lo que hará que se sientan más identificados contigo y fomentarás el diálogo .
- Les ayudan a tener claras ciertas pautas sobre las situaciones diarias y los acontecimientos y, además, esto les permite identificar la función de guías permanentes.
- Les enseñas valores como el respeto, la tolerancia, el orden, etc.
- Les enseñas a que deben renunciar a veces, que deben aceptar un "no" por respuesta; de esta manera, los estás educando para que sean capaces de enfrentarse a las crisis y frustraciones que puedan aparecer en sus vidas.
Aprende a poner límites a tus hijos
- Muéstrate firme, pero con afecto y tranquilidad.
- Mantén la coherencia de las reglas con el padre. No es bueno que se contradigan.
- Dales una orden cada vez. Muchas tareas en una misma orden confunden a los pequeños.
- Sé clara y concreta en tus reglas. Utiliza frases cortas y simples.
- Sé persistente en las pautas y límites . Si tus hijos se percatan de que tus límites sólo se cumplen a veces no van a cumplirlos, porque no lo verán como una norma sino como una elección.
Fuente: http://www.vistamagazine.com
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